Pasando el ecuador de junio, con apenas dos semanas pendientes en este primer año como romanos, comienzan los balances, la evaluación de lo que ha sido este curso. Toca poner en un platillo lo que quería hacer y en otro lo que realmente he hecho, valorar lo conseguido, analizar la razón de lo pendiente. Mediado ya junio, desmontada por el calor sofocante de los últimos días, perdida en el diluvio que no cesa, doy por aprobado el curso, con la tarea de reflexionar este verano sobre los modos de conseguir que el año que viene sea aún mejor.
Decían en el Mago de Oz que en algún lugar sobre el arcoíris está esa tierra donde los sueños que te atreves a soñar, se hacen realidad…tal vez esa tierra sea aquí, en Roma. ¡¡Al menos habrá que darle la oportunidad!!

y, si te fijas, son baldosas amarillas…vamos, Dorothy!!!!!! TQ.
Me encanta !!!